El Libro Guinness de los Récords ya tiene una nueva actualización, pues el código QR más grande del mundo ya ha sido incluído en sus registros. Se trata de uno creado en un laberinto de 28.000 metros, 15 acres, en las afueras de la localidad canadiense de Alberta.
La familia Kraay contrató la ayuda y gestión de un experto en laberintos tras ver la idea en una revista, cuando decidieron crear algo así en su granja particular. Acondicionaron un campo de maíz particular y fueron preparando y recortando todo el camino, formando un gigantesco código QR que enlaza con las página web de la granja, y que puede ser escaneado por cualquier dispositivo que disponga de una aplicación que realice esas labores.
Con este movimiento, los comerciantes locales pretenden aumentar las visitas a su web y, por ende, mejorar las relaciones comerciales de la zona.
Si es que a veces me pregunto a quien se le ocurren estas ideas… o sea, ¿Quien es el genio que piensa «vamos a hacer un código gigante, para que cuando la gente pase volando en su avioneta por encima saque el móvil, lo escanee y se pase por la página web de nuestra granja»?
A veces, aunque son iniciativas muy simpáticas, no las han pensado en lo más mínimo.
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Una idea muy original, desde luego. Pero el nombre de la familia está colocado en sentido vertical, cuando lo más lógico es que lo estuviera en horizontal, debajo de la auténtica orientación del código QR,¿no?
ResponderEliminarAhora mismo, si queremos ver el código en su orientación adecuada, deberíamos colocar la foto en sentido horizontal, quedando el nombre en el margen izquierdo...
Qué flipe tiene la peña! Espero que les funcione la idea.
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